El Invierno en Leningrado (Bruno Varela)

-Vamos Radek, ¿que no puedes cargar un poco más? - dijo Sverdlov riendo burlonamente
Volvió Radek hacia Sverdlov, y exclamó:
-¡Sinceramente no puedo aguantar el ser cremador! Odio este olor, y no tengo la condición médica para cargar tanta basura... - Suspirando como si fuera su ultimo aliento.
Sverdlov se sentó un momento y encendió un cigarrillo.
-No comprendo porque si vivimos en un mundo donde todos somos iguales, porque a nosotros nos toca quemar la basura que viene de la ciudad. Quisiera hacer cohetes, o ser político y gobernar a la Madre Pátria. - Sverdlov bajó la cabeza y exhaló el humo del cigarro.
-Yo aveces me pregunto... Porque nos dicen que el mundo fuera de la Madre Patria es tan cruel... Uno puede hacer lo que quiera, puede trabajar en lo que quiera... y si es bueno, le pagan más. ¿eso no es mejor que el Socialismo? - Se preguntó Radek
-No se, ni me importa... de todas maneras no podemos escapar, o algo... debemos de continuar, Radek - en ese momento Sverdlov se levantó estirandose y bostezando.
-Muero de frío, Sverdlov. Este es el último bulto del día. ¿Verdad?- Dijo Radek, acercandose al bulto de basura y acomodandose su gorra.
-Así es, camarada. Ve empezando, en un momento te alcanzo. - Sverdlov le ponía un poco mas de leña al incinerador para basura.
-Sverdlov... - La mirada de Radek se congeló. soltó la pala con la que había empezado a carvar la basura. - Hay un hombre muerto... - Se acercó Sverdlov. y Radek, al ver su rostro, notó que sus ojos se abrieron un poco más que de costumbre y abrió un poco la boca, intentando cojer aliento.
-Solo... terminemos nuestro trabajo... - tartamudeó Sverdlov